Sujeto Activo y Pasivo en Contabilidad

En la contabilidad, al usar el término sujeto activo y pasivo se está refiriendo a una relación entre dos partes, cuya función es exigir a una de ellas el cumplimiento de una obligación acordada.

Para entender mejor, definiremos por un lado al sujeto activo y por otro lado al sujeto pasivo.

¿Qué es el sujeto activo?

El sujeto activo en contabilidad es aquella persona natural o jurídica que tiene un derecho a exigir un cobro por el contrato de un servicio o la venta de un producto a crédito.

¿Qué es el sujeto pasivo?

El sujeto pasivo es aquella persona o entidad a la que le recae la obligación a pagar por el contrato que acordó con el sujeto activo. En otras palabras, representa al deudor por el servicio o el crédito de un producto que obtuvo.

Sujeto activo y pasivo en contabilidad

En contabilidad, el sujeto activo es el titular o el dueño de un producto o servicio, en cambio, el sujeto pasivo es la parte opuesta quien adquiere del sujeto activo su servicio o producto con la responsabilidad de cumplir una obligación.

Dentro de esta figura se puede definir que el sujeto activo es el vendedor y el sujeto pasivo es el comprador. Con la principal diferencia que el sujeto activo espera que el sujeto pasivo le cancele o cumpla su obligación establecida.

Ejemplos de sujeto activo y pasivo

Suponiendo que una empresa de nombre “INMOTARIJA” se dedica a la venta de inmuebles y terrenos. La parte del sujeto activo es la empresa “INMOTARIJA” quien vende a la sociedad en general, cuyo comprador de uno de sus inmuebles o terrenos llega a ser el sujeto pasivo. Ambas partes firman un contrato de compra y venta, sin embargo, la empresa “INMOTARIJA” solo espera que su comprador cumpla con su obligación de pago.

Suponiendo otro ejemplo, una entidad financiera (Banco) ante su clientela es un sujeto activo ya que es el acreedor por realizar los préstamos, en cambio, su cliente es el deudor y representa a un sujeto pasivo.

Cuando se trata de los impuestos, de la misma manera, las autoridades fiscales (sujeto activo) esperan el cumplimiento de las obligaciones tributarias que tienen sus contribuyentes (sujeto pasivo).